Mi último perdón.

Entre las disculpas que te dije el otro día me faltó una. 


Creo que es la más importante, es pedirte perdón por amarte tanto incluso más que a mí misma, porque supiste actuar a corde a ello y dejar un día tu enojo en mí como nunca nadie lo había hecho, te pido perdón por haberte perdonado ese pequeño detalle que por cierto no se le hace a alguien a quien dices amar. 


Si un día me voy, un día lejano o cercano, no le sé, ten presente que nada de eso lo causaste tú, fui yo por haberte querido tanto, en ese momento te amaba tanto que ni yo misma lo entendí hasta que se me rompió el alma de oírte una y otra vez por noches enteras de insomnio, de cargar tanta decepción por los demás en esos dias, el duelo de mi madre y lo peor ...aunque suene dramática este vacío en que estoy y que tú no llenas ya porque no hay tiempo para mí como un día lo tuve para tí. 


No te acuso de nada, fui yo la que dañó todo por creer que había tanto donde no hay ahora nada. 


Perdoname. 


Anna. 

Mayo 17.22.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Eutanasia.

Brecha.

Hendiduras. 💜